Que recuerde cuando aprendí en mi lejana juventud una palabra determinada no es nada extraordinario pero si tal vocablo es ‘pleonasmo’ se puede sospechar una enfermedad mental. No tengo afecto especial por la gramática aunque admiro a los que dominan ésa ciencia como el amigo de quien aprendí la palabra y concepto de pleonasmo. Desde mi pleonástica epifanía hace más de cincuenta años he abominado a los pleonastas.
La palabra pleonasta no existe en español y es lamentable. Tal vez sólo sea en eso el inglés superior a nuestra lengua: ellos tienen la dicha inefable de poseer el término pleonast para execrar a los practicantes del pleonasmo.
Un pleonasmo no es una inclinación sexual inconfesable o una enfermedad pulmonar ni tampoco se deriva de pleon que es el nombre del abdomen de los crustáceos. Pleonasmo, salvo con licencia poética, es el vicio vituperable de añadir información implícita. Por ejemplo, en inglés dicen con mortificante frecuencia, joined together pese a que aún los crustáceos analfabetos saben que no es posible estar unidos separados. En la radio dicen continuamente, our listening audience. ¿Han habido jamás audiencias que no estén escuchando?
La etimología de pleonasmo es común al inglés y al español. Proviene del latín que a su vez la tomó del griego pleonazein que significaba superabundancia, exageración y se derivó de pleon que quiere decir más numeroso, abundante. Por eso me irrita sobremanera que le digan pleon al abdomen de los crustáceos pues es de una imprecisión colindante con el vilipendio. Yo nunca he visto un cangrejo barrigón en cambio hay infinidad de seres humanos, sobretodo hombres, que cargan abundantes «pleones»(¡Ooops, he pleonasticado!)
Los abogados de habla inglesa son notoriamente pleonásticos, llenos de expresiones como will and testament y cease and desist. Parece ser que esa tendencia se debe a la redacción de documentos en los siglos posteriores a la invasión normanda porque incluían las mismas palabras en anglosajón y en francés o latín para evitar confusiones. No sé si los letrados hispanoparlantes son igualmente propensos pero en el hablar popular decimos cosas como «lo ví con mis propios ojos» exactamente igual al inglés «I saw it with my own eyes».
Hay usos retóricos del pleonasmo en las obras de grandes escritores y poetas. Ocurre en la Biblia, particularmente en los salmos pues era de uso común en la poesía hebrea. La aplicación poética redime al pleonasmo pero no a las atrocidades como tuna fish. Debemos esforzarnos a usar solamente frases inteligentes como subir para arriba o bajar para abajo.
Estimado Keo
gracias por el buen rato de buen humor que me haz regalado con tus textos. Picantes y deliciosos ademas de eruditos… como colombiano que soy, reconozco esa locura nuestra que nos proteje contra las ideas macabras… La ciencia con alegria y risa, that is the question !
animo con tu tarea de sembrador de palabras
perdona la falta de acentos pero mi ordi no habla castellano
Hola, leyendo el artículo acerca de pleonasmos encuentro la siguiente frase:
…«lo ví con mis propios ojos” exactamente igual al inglés «I saw it with my own eyes”.
No es «exactamente igual» también un ejemplo de pleonasmo?
Si es igual es siempre «exactamente igual» y no «parcialmente igual»…
Pingback: PLEONASMOS - Plataforma Latina